LF2
Latidos imprevisibles (Por Carlos Colinas)
9/21/2015 - 11:36 AM
Carlos Colinas, perfecto conocedor de nuestro baloncesto femenino y de la LF2 especialmente como anterior entrenador del Celta, nos introduce a través de su análisis en la nueva edición de una competición extraordinaria.
CARLOS COLINAS / DIRECTOR DEPORTIVO RC CELTA BALONCESTO
Lejos de encasillarse como anodina, sin alma y previsible, la Liga Femenina II2015-2016 es el paradigma de una competición fresca y expectante. Se abre un escenario donde en los próximos siete meses casi 340 jugadoras muestren su desarrollo deportivo, y en muchos casos, acaben de madurar esas virtudes que se le adivina a una jugadora que culmina ya su etapa formativa.
No hay restricciones. Ampliada a 28 clubes, su trasluz llega a muchos puntos de la geografía españolarepresentados en esta liga. Cuatro entidades se encontrarán a primeros de mayo en la tesitura buscada desde este momento: el ascenso. Desde atrás se ofrece un muestrario donde se mezclan proyectos ambiciosos que en meses pretenden estar en el escalón más alto, con otros más modestos, más autóctonos, que hacen de su trabajo propio y subsistencia la razón de ser. Y también hay sitio para aquellos de definición más compleja y que la propia competición se encargará de adjetivar. Las limitaciones económicas recientes han generado plantillas con ADN y esencia propia, que permiten a aquellas niñas alevines e infantiles de club, llegar a “su primer equipo”.
Es esta competición también un cruce de caminos. De aspiraciones y asentamientos personales. Siempre conviven perfiles de jugadoras expertas de largo recorrido y sabiduría, con papeles más protagonistas de lo habitual, y que aportan en momentos trascendentes ese toque diferencial. Y conviven también jóvenes en su primera aparición adulta, con miras más lejanas. Hay sitio para todas, incluso dentro de las mismas cuatro paredes. En muchos proyectos, el matiz está en el equilibrio que ofrece una elección correcta de piezas.
Ninguno de los 28 proyectos tiene garantía de éxito sin un cerebro que gestione el día a día en pista, y construya la interioridad del equipo. En esa obligación que el entrenador tiene de trascender a lo que le rodea en la preparación y competición, la Liga Femenina 2 acoge técnicos tan duraderos como la propia competición, con otros muy noveles, en su primera reválida importante y quizá de paso hacia metas y objetivos más altos. Ese antagonismo enriquece a la propia competición. Tener un credo y respetarlo hasta las últimas consecuencias como entrenador dota a tu proyecto de estilo y señas de identidad propias.
Jamás un guión escrito sobre esta liga ha sido respetado. Caben las sorpresas, los cambios de ciclo, las situaciones que nadie contempla. Todo aquello que proyecta de esta competición una base firme y necesaria en el desarrollo de la jugadora nacional joven que quiere hacerse mayor de edad en una pista.