ÁREA DE COMUNICACIÓN FEB

La relación del Vega Lagunera Toyota Adareva con Alba Peña va más allá de un contrato profesional. La jugadora canaria se ha visto respaldada por su club en los momentos difíciles de lesiones, y ella ha respondido con un compromiso fuera de toda duda en las épocas complicadas del equipo.

“Les debo mucho” afirma Alba “porque siempre me han tratado muy bien. Estuve con ellos en el ascenso a LF2 desde Primera Autonómica, y me gustaría ser parte del ascenso a LF Challenge.” La alero canaria no esconde las intenciones de su equipo: “no me gusta hablar de objetivos, pero te mentiría si te dijera que no pensamos en la Fase Final.” Y es que con un balance de 13-2 es ya un equipo temido en el Grupo A de la LF2.

Con 16 años debutaba en la competición y se proclamaba campeona de Europa U16. Un talento precoz que, diez años después, es una de las jugadoras dominantes de la LF2 (14.9 puntos anotados por encuentro) y ejerce como capitana y referente de las jugadoras de cantera (nos aconseja que apuntemos el nombre de la junior de su equipo, María Luque).

Llegó al equipo en 2017 y una lesión le impidió ayudar a su equipo en la lucha por la permanencia. Quiso devolver al Vega Lagunera Adareva a la LF2 y aportó su calidad durante dos temporadas en Primera Autonómica hasta conseguir el ascenso. Después de asentarse en la categoría la temporada pasada, el reto es dar un paso adelante en esta.

Ocho victorias consecutivas ¿sois el equipo de moda?
Estamos muy contentas con la evolución de la temporada. Empezamos muy bien y el trabajo del día a día está dando sus frutos. El equipo está creciendo jornada a jornada y se están viendo los resultados del esfuerzo realizado.

Las dos derrotas fueron en la misma semana, ante Ingenia Solar Energy y Maristas Coruña ¿sólo fueron un mal bache?
Me gusta ver el lado bueno de las cosas y, posiblemente, esas dos derrotas también tuvieron su lado positivo. Nos sirvió para corregir errores que teníamos, y creo que mejoramos nuestro juego después de esos dos partidos.

También es cierto que habéis ganado a rivales directos de la zona alta…
Estamos en una liga en la que no te puedes fiar nunca del rival que tienes enfrente. Hay una gran igualdad y no puedes empezar el partido sin esa dosis de incertidumbre. Hay que estar concentrados al 100% para ganar cada partido. El hecho de vencer a los equipos de la zona alta sabe un poquito mejor, porque te da confianza en el trabajo que haces.

Para los que no os han visto ¿cómo está jugando el Vega Lagunera Toyota?
Tenemos mucho talento en todas las posiciones, con jugadoras capaces de sacar cosas positivas en los uno contra uno. Eso complica la defensa de nuestros rivales. Si se centran en una o dos jugadoras, pueden aparecer otras. Además, tenemos los roles definidos y sabemos qué puede aportar cada jugadora. Si, además de talento, somos uno de los equipos que menos puntos encajamos en defensa, nos convertimos en un rival difícil de ganar.

¿Cuál es el objetivo del equipo? ¿Tenéis la Fase final en mente?
No me gusta hablar de objetivos, pero te mentiría si te dijera que no pensamos en la Fase Final. Sobre todo, viendo en la posición en la que estamos ahora mismo.

¿Cómo es tu relación con este equipo?
Es un club que me ha tratado siempre muy bien. Es un club familiar, pequeño, sin grandes posibilidades económicas, pero en el que me he sentido muy a gusto desde que llegué. Les debo mucho. Ellos apostaron por mí en momentos difíciles y yo he apostado por ellos. Estuve con ellos en el ascenso a LF2 desde Primera Autonómica, y me gustaría ser parte del ascenso a LF Challenge.

¿Cómo te encuentras esta temporada?
Me encuentro muy bien. Después de la lesión de la temporada pasada tenía ciertas dudas, pero me he sentido bien dentro de la cancha. Además, hemos formado un grupo que se lleva bien fuera de la cancha, tanto jugadoras como equipo técnico, y eso se demuestra en el juego.

¿Cómo ves tu futuro? ¿Te sigues viendo con la misma camiseta?
Me encuentro muy a gusto, y estamos dando pasos adelante juntos. Creo que me gustaría seguir en el Adareva hasta que se pueda.

¿Y ejerciendo de capitana?
Los que me conocen saben que me gusta implicarme en el equipo. Lo de ser capitana puede ser sólo simbólico, pero en mi caso me gusta ejercer de ello. Siempre lo he hecho y ahora con más motivo. Intento hacer que el equipo crezca fuera de la pista, ayudar a resolver problemas y dar consejos a las jugadoras más jóvenes.

Una de ellas, María Luque, está siendo una de las revelaciones de la competición…
Me siento muy identificada en ella. No deja de ser una niña porque tiene 18 años, pero está demostrando una madurez importante. Puedo ser una referencia para ello, porque me lleva viendo jugar desde muy pequeña, y esta temporada la exigimos como una senior, así que hago todo lo que sea para poderla ayudar. Hablo mucho con ella y responde en los entrenamientos. Ojalá pueda estar con nosotros mucho tiempo.

¿La cantera canaria sigue estando en buena forma?
Tenemos dos equipos en LF Endesa y eso es bueno para las jóvenes jugadoras. Echo en falta más visibilidad del baloncesto femenino en la isla, y ahí intentamos aportar nuestro granito de arena para el baloncesto en la isla y en toda Canarias.