Con un Serrano Macayo repleto, Ál-Qázeres comenzó enchufadisimo el partido. Dos canastas de Carla Ramos y Ndidi Madu lanzaban en el encuentro a las anfitrionas. Jacinto Carbajal aplicó una defensa que no dejó hacer al combinado donostiarra, que en el inicio del partido no encontraba a sus referencias. Jara Salgado anotaba un triple y obligaba a pedir tiempo muerto a las donostiarras (7-0, m.5). Un tiempo muerto que surtió efecto y que devolvió la igualdad. Una igualdad que permanecería hasta el final del primer periodo, en el que el Al-Qázeres terminó dominando por tres puntos, 13-10. 

No obstante, Universidad del País Vasco volvió a tomar la iniciativa. Arantxa Novo se echaba el equipo a la espalda y UPV se mantenía enganchado en el encuentro. Pero apareció en un momento providencial para el partido Verónica Sánchez. La jugadora del Al-Qázeres volvió a reenganchar a las extremeñas. Pero pronto Universidad del País Vasco comenzó a imponer su físico, un factor en el que las extremeñas tienen uno de sus puntos débiles. Miriam Forasté y Stephanie Madden se convirtieron en puntales que castigaron la pintura extremeña, y que al descanso hacía que las locales cayeran por 25-32, completando un parcial de 0-8.

Carla Ramos salió enchufada tras el paso por vestuarios, con un triple que levantó a los aficionados extremeños. Pero las de Aránzazu Muguruza seguían apretando e imponiendo su nivel físico bajo los tableros. Stephanie Madden continuaba sumando y aumentando las diferencias, y a la fiesta se sumaban también jugadoras como Iulene Olabarría. Pero llegó la reacción local. De la mano de Ndidi Madu, Carla Ramos y Alejandra de la Fuente, Al-Qázeres se colocó a 6 puntos, 42-48, y obligó a UPV a frenar el choque. Un parón que benefició a las donostiarras, que lideraban al descanso, 42-50.

Un pequeño susto de Arantxa Novo abrió el último cuarto. La base de UPV se dio un golpe pero pudo continuar el resto de choque. Mientras, Carla Ramos y NDidi Madu se encargaban de acercar al Al-Qázeres en el marcador. Algo que Novo volvía a evitar en todo momento, para decepcion de la afición local. A 4 minutos del final, el 51-60 del marcador empezaba a dilucidar el nuevo equipo de Liga Femenina. Pero Al-Qázeres no se rindió y consiguió acercarse a cinco puntos (57-62). Las extremeñas no se rindieron y en un acto de fe, acercaron la eliminatoria a dos puntos a 1:50 del fin (60-62). Pero Iulene Olabarría y Miriam Forasté devolvieron la ventaja al equipo donostiarra, que certificó su ascenso a Liga Femenina, 62-70